martes, 28 de febrero de 2012

Inocuidad de Banavih sobre el mercado inmobiliario

Según reseña la página Web de El Universal el día 14 de febrero de 2012, "el presidente del Banco Nacional para la Vivienda y Hábitat (Banavih), Mario Isea, estimó que con el torrente de ventas de las viviendas de la Misión Vivienda Venezuela, el precio de la vivienda va a bajar". Nuevamente se anuncia un objetivo falaz, digno de la desesperación política−electoral y del desconocimiento económico más supino. En un país que cuenta con un déficit habitacional que superaría las dos millones de unidades y con una tasa natural del crecimiento de la población que supera a las mejores estimaciones de producción de viviendas por parte del Gobierno, tal anuncio resulta no solo poco creíble sino simplemente falaz. Más allá, el reducido esfuerzo y producción de viviendas por parte del Gobierno ha sido, supuestamente, destinado a damnificados que en un principio ni siquiera formarían parte del mercado inmobiliario, especialmente el primario e incluso el secundario de compra y venta. En este sentido, con un déficit habitacional que superaría los dos millones de unidades, un crecimiento natural o vegetativo de la población más que proporcional a la producción de viviendas oficiales, y la entrega de escasas unidades habitacionales a damnificados que no formarían parte del mercado de compra−venta de viviendas, la acción pública resulta inocua hacia el mercado de compra−venta de inmuebles. Lo anterior cobra especial sentido dado el ataque sistemático que el Gobierno ha propinado hacia el sector privado inmobiliario, sector que generalmente constituye el principal oferente en el mercado inmobiliario. Así las cosas, lejos de existir la posibilidad de atender a la demanda insatisfecha, esta podría estar incrementándose. Las viviendas, por constituir un bien no perecedero, constituyendo de hecho un bien duradero, de existir una oferta privada robusta más que proporcional al crecimiento vegetativo de la población, no se produciría recomposición intertemporal de la demanda, bajando la presión de la demanda sobre el precio. Pero para que esto ocurriese, habría que dejar al mercado actuar libremente, entre oferentes y demandantes. Un sector oficial produciendo un reducido número de viviendas, entregando unas pocas a damnificados, jamás coadyuvará a la baja de los precios en el mercado de viviendas, porque se producirá, como suele ocurrir en los mercados de pool con déficit de oferta, un poder indirecto de mercado −terminología acuñada por David Besanko−, el cual presiona al alza de los precios. Terminan siendo los demandantes, especialmente aquellos con mayores disponibilidades de pago, quienes pujarán por acceder a las escasas unidades habitacionales. Lo más contundente y preocupante por implicar falta de rigor y conocimiento económico por parte del sector oficialista, es que una situación como la anterior, de altos precios explicados por la propia demanda, no tiene por qué constituir un problema de interés público o pérdida de excedente del consumidor y bienestar social. (Ante las dudas sobre lo que aseveramos acá se recomienda estudiar bibliografía básica de la teoría de la organización industrial y/o economía industrial). El verdadero problema se origina en el ataque sistemático al sector privado de la vivienda, porque la solución al problema del déficit habitacional pasa indefectiblemente por tener en Venezuela a un sector privado inmobiliario robusto y creciente. Economista. Master en Competencia y Regulación de Mercados Rafael González

El Mundo
27-02-2012

Recopilado por:
Lic. Henry Medina
Asesor Inmobiliario, de Seguros e Inversiones
04166220453
04143692526
twitter: @Henry_Medina
PIN 31E5A7B4
hmedina30@yahoo.es

SUSCRIBETE AL GRUPO YAHOO CORREDOR_INMOBILIARIO HENRY MEDINA
http://es.groups.yahoo.com/group/corredor_inmobiliario/

Subscribir:
corredor_inmobiliario-subscribe@yahoogroups.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario