Voceros de las redes de inquilinos señalaron que se revisarán las negociaciones ya avanzadas con los dueños de inmuebles destinados al alquiler
MAYELA ARMAS H.
La Ley de Arrendamientos establece que los inquilinos y propietarios al momento de firmar un nuevo contrato de alquiler deben registrarlo ante la Superintendencia de Arrendamientos para la estimación del canon. Pero si se detectan acuerdos que no han sido notificados al organismo, la instancia analiza realizar regulaciones de oficio para fijar la renta.
Según fuentes oficiales, si existe una relación arrendaticia en la que el propietario ha previsto ajustar los cánones sin que la Superintendencia los haya revisado, el organismo tomará medidas, siendo una de ellas las regulaciones de oficio, que obligarán a adaptar los contratos a los términos de la Ley.
Agregan que la institución recibe información por diferentes vías, de manera que los funcionarios del ente supervisor pueden acercarse a los inmuebles y efectuar las inspecciones de los bienes para la posterior determinación de la renta.
Si bien el marco legal tiene más de un año de vigencia, ahora es cuando comenzará el proceso de revisión de contratos y cálculo de las rentas, pues fue esta semana que el Ministerio de la Vivienda presentó las normas que complementan la estimación de los alquileres.
La determinación del canon de arrendamiento, según lo que señala la Ley, se rige por cinco parámetros: la dimensión del inmueble, la vulnerabilidad sísmica, la depreciación, la región geográfica y el valor de reposición (metro cuadrado), publicados en Gaceta Oficial.
De hecho, la resolución señala que previa a la estimación del metro cuadrado se efectuará una inspección del inmueble en la que se evaluarán los aspectos constructivos. Luego se establece un puntaje y, según los puntos, se define el valor de reposición, para lo que se fijó una escala del precios del metro cuadrado que prevé un valor mínimo de 3.380 bolívares y uno máximo de 8.340 bolívares.
Los voceros de las organizaciones de inquilinos señalaron ayer que el valor de reposición final no solo comprende los tabuladores ya publicados, pues también abarca otros aspectos. Detallaron que para las estimaciones definitivas se incorporarán el área total de construcción (zonas comunes del edificio) y el espacio o metraje vendible de dicha edificación.
Marlegne Sierralta, vocera de la Asociación de Inquilinos Bolivarianos, apuntó que los cálculos abarcan todos los elementos, incluyendo el terreno.
Los voceros apuntaron que los cálculos de renta comenzarán una vez que se tengan los inspectores de las viviendas. Mañana la Sunavi realizará un taller para formar inspectores y, para ello, está convocando a particulares, miembros de los consejos comunales y comunas y a estudiantes de ingeniería y arquitectura.
Después de esos talleres se efectuará una coordinación con ese personal a fin de agruparlos por zonas y así agilizar la verificación de las casas.
Durante las evaluaciones, los inspectores tienen que llenar un formato creado por la Sunavi, y esa información será entregada a los valuadores del organismo, quienes calcularán los cánones. El procedimiento de estimación de las rentas es de 20 días, que corren a partir del momento en que propietarios e inquilinos solicitan la revisión de los cánones.
Otras revisiones
Los precios del metro cuadrado presentados esta semana también serán referencia para la venta de las viviendas en alquiler y, sobre este aspecto, Marlegne Sierralta comentó que la negociación de los 100 edificios destinados al alquiler que comenzó el pasado año será objeto de revisión.
De esos 100 inmuebles, en 12 existen acuerdos con los dueños, pero esas ventas que ya estaban avanzadas tienen que ser revisadas para que los precios sean ajustados a los nuevos tabuladores. Según Sierralta, se espera que el proceso de avalúo se acelere y que además se pueden terminar de transformar esas edificaciones en propiedad horizontal.
VALOR FINAL
• Para calcular el valor de construcción de las viviendas en alquiler se incorporan más elementos.
• El proceso de estimación consiste en considerar el área total de construcción (zonas comunes y terreno que ocupa el edificio). Esos metros cuadrados se multiplicarán por el valor de reposición (tablas publicadas esta semana).
• El resultado de esa multiplicación se divide entre los metros cuadrados vendibles del inmueble.
• El valor que se genere de esa operación se multiplica por los metros cuadrados que tiene cada vivienda.
El Universal
24-11-2012
Recopilado por:
Lic. Henry Medina
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