Desde el martes 5 de junio los trabajadores de la planta de Petrocasa, ubicada en Carabobo, iniciaron una protesta pacífica dentro de las instalaciones donde reclamaban el fin del modelo capitalista que rige en la planta e instaurar un modelo socialista que incluya a los trabajadores en la toma de decisiones de la empresa.
A pesar de la protesta nunca se detuvo la producción. "El Gobierno hace todo lo contrario a lo que dice la Ley Orgánica del Trabajo.
En Petrocasa hay despidos injustificados, no tienen mejoras salariales, existen diferencias de sueldo, (debería ser igual cantidad de trabajo, igual pago para los trabajadores)", indicó Marcela Máspero, coordinadora de la Unión Nacional de Trabajadores (Únete).
Según José Antonio García, coordinador adjunto de Únete, ellos mantenían una manifestación pacífica, pues querían exponer su reclamo, pero "a la directiva de Petrocasa no le gustó, por lo que mandó a la Guardia Nacional y unos motorizados armados para que atacarán a los trabajadores para prohibirles la huelga. Cuando éstos llegaron arremetieron contra los empleados y contra Mercedes Martínez una de las directivas de la empresa que estaba apoyando a los manifestantes.
Ella había sido reenganchada nuevamente en la planta". García señaló que "Petrocasa es una empresa social, y debe establecer una relación de la gerencia con los obreros, para que juntos puedan tomar decisiones y los trabajadores puedan ser contralores de la empresa", pero actualmente ocurre todo lo contrario.
Geraldine Cabrera, trabajadora de la planta, comparte la misma opinión del coordinador de Únete, pues ella afirma que la gerencia y la directiva de la empresa gubernamental actúan bajo las premisas de un sistema capitalista, que los explota, los acosa y arremete contra ellos. José Antonio García expresó que la gerencia y directiva de Petrocasa quieren establecer su propio marco y echar a un lado a los trabajadores, algo que consideran una contradicción del discurso revolucionario. "Antes había 200 trabajadores en una empresa disfrazada de cooperativa que se llamaba Todos comemos`, en la cual había tercerización y esto lo prohíbe la revolución", señaló García.
SE BURLARON DEL PUEBLO Al igual que Geraldine Cabrera sus compañeros de trabajo, algunos de ellos rojos rojitos, se sienten decepcionados porque la directiva no ha tomado a los trabajadores en cuenta para participar en las decisiones de la empresa. Además, denuncia, la Guardia Nacional ejerció la represión sin contemplaciones.
Ella se pregunta: "¿Es qué acaso la Guardia Nacional no es del pueblo, por qué arremete contra éste?".
Cabrera denunció que todo empezó por la violación de los elementos de seguridad industrial, que no los hay, irrespeto a la libertad sindical porque los trabajadores no pueden decidir en ningún asunto de la empresa, dificultades en la escala salarial y en el modelo de gestión.
Marcela Máspero rechazó las acciones de violencia cometidas por la GN contra los afectados de Petrocasa.
Dijo que la planta es como un campo de concentración, pues revisan a los trabajadores de pies a cabeza y a veces no los dejan trabajar. Exige que se presente un fiscal superior para que pueda defender a los empleados de este atropello.
Tal Cual
14-06-2012
Recopilado por:
Lic. Henry Medina
Asesor Inmobiliario, de Seguros e Inversiones
04166220453
twitter: @Henry_Medina
PIN 31E5A7B4
hmedina30@yahoo.es
http://es.groups.yahoo.com/group/corredor_inmobiliario/
No hay comentarios:
Publicar un comentario