martes, 21 de mayo de 2013
Importación de gasolina sacrificó la construcción de 270 mil viviendas
No se produce la gasolina que requiere el mercado interno. (Foto El Carabobeño)
Con el dinero que Venezuela gastó en comprar gasolina a Estados Unidos en 2012, el Gobierno pudo fabricar casi 270 mil viviendas de interés social. Más de un millón de personas ya tendrían techo propio.
El Departamento de Energía norteamericano resume en sus cifras que Venezuela compró unos 66 mil 300 barriles diarios de combustible el año pasado, debido a las fallas en las refinerías, sobre todo tras la explosión de agosto pasado en el complejo de Amuay, en Paraguaná.
La compra de gasolina a los altos precios internacionales, representaría una erogación a Petróleos de Venezuela de unos 8 mil 500 millones de dólares, cuatro veces más de lo que perdió en 2011.
El economista Darwin Alvarado, profesor de la Universidad de Carabobo, calculó que a dólar oficial se trata de 53,5 mil millones de bolívares. “Si el Gobierno dice que hace una casa en 200 mil bolívares, ya habría 267 mil viviendas adicionales terminadas”.
Los balances auditados de Pdvsa dan muestras de un incremento de 47% de las compras de crudo y otros productos para el mercado interno. Llegaron a 26 mil 341 millones de dólares en 2012.
En la semana que la refinería de Amuay permaneció completamente paralizada por la explosión que dejó 40 muertos, la estatal venezolana importó aditivos para combustibles por mil 572 millones de dólares, se afirma en los balances.
Pero, la refinería entró totalmente en funcionamiento ocho meses después del accidente. No hay reportes oficiales de Pdvsa al respecto.
Y es la más barata
Si Venezuela debió comprar gasolina en el mercado exterior para el consumo local, el pago fue mucho más alto de lo que se vendió. En Estados Unidos, un litro de combustible está alrededor de 0,97 dólares; aquí es de 0,015 dólares.
Después de la devaluación de febrero, el costo en moneda norteamericana de la gasolina bajó de 0,022 a 0,015 dólares por litro. En bolívares es de 0,97, la de mayor octanaje.
El hueco fiscal es entonces más grande. El economista Alvarado citó que unos lo ubican en 55 mil millones de dólares, y otros en 70 mil millones. Recuerda que no se resuelve con un aumento en los precios, aunque sostiene que sería una medida sensata.
Si el litro de gasolina se fijara en cinco bolívares cubriría los costos de producción y distribución y el subsidio sería menor. Pero, llenar el tanque serían 200 bolívares, algo a lo que los venezolanos no están acostumbrados.
Los presidentes, incluidos los de la revolución, le han tenido miedo a ese incremento, recuerda el especialista. Desde 1996 el precio es el mismo.
Mientras el precio del carburante no llega ni a los 100 centavos de bolívares, una botella de un litro de agua cuesta 12 bolívares, casi seis un paquete de harina de maíz precocida y 7,20 un kilo de arroz.
Llenar el tanque del vehículo nunca cuesta más de cinco bolívares, pero generalmente los conductores regalan en cambio a quien presta servicio en la estación, como una propina bastante elevada.
Más compromisos
Venezuela mantendrá el envío de crudo a los países de Petrocaribe bajo el esquema que ideó el ex presidente Hugo Chávez. Es un negocio criticado por economistas y expertos, que aseguran pérdidas para el país al entregar “oro por espejitos, como en los tiempos de Cristóbal Colón”, comparó Alvarado.
De Cuba son enviados médicos a cambio de petróleo; de Nicaragua, carne y caraotas. No hay mayores ingresos con esos mecanismos, sostiene el profesor, quien fue director de la Escuela de Economía de la UC.
No es esta, sin embargo, la razón por la que escasean las divisas en el país. Alvarado revisó cifras y concluyó que la producción y los precios del crudo no han fluctuado de manera importante los últimos años, así que los ingresos se han mantenido.
Esos ingresos se han ido en importar alimentos, medicamentos y combustibles, lo que implica que “no hay orientación estratégica en el gasto público de Venezuela. Sólo se basa en evitar un conflicto social”.
La salida para el Gobierno tiene dos puertas visibles y una clausurada: una emisión de bonos, que redundaría en más endeudamiento; aumentar los impuestos. Subir la gasolina es poco probable una opción.
El Carabobeño
20-07-2013
Recopilado por:
Lic. Henry Medina
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