El presidente de Soros Fund Management critica al ex presidente de la Reserva Federal, Alan Geenspan, al que le imputa responsabilidades de la burbuja inmobiliaria.
"Es probable que Europa se vea afectada casi tan negativamente como Estados Unidos. España, con una burbuja inmobiliaria propia, y Reino Unido, dada la importancia de Londres como centro financiero, son particularmente vulnerables". Éste es uno de los fragmentos que recoge el gurú George Soros en su nuevo libro "El nuevo paradigma de los mercados financieros".
En medio de una de las más graves convulsiones financieras desde la Gran Depresión, el legendario inversor y filántropo explica a lo largo de casi 250 páginas los orígenes de la crisis actual y propone una serie de políticas que deberían adoptarse para afrontarlas.
Soros , que en cuanto a experiencia en los mercados financieros no tiene rival, explica la acutal crisis haciendo uso de sus décadas de estudio del modo en que los individuos y las instituciones manejan los ciclos de la prosperidad y las crisis que dominan la actividad económica mundial. "Ésta es la peor crisis financiera desde 1930", considera Soros al refererirse a la magnitud de los problemas financieros que se están propagando a través de Wall Street y otros centros del mundo.
El presidente del Soros Fund Management y fundador de una red global de fundaciones dedicadas a la defensa de las sociedades abiertas, compara el pinchazo del boom inmobiliario de España con el de EEUU. "Lo que distinguía la burbuja inmobiliaria de Estados Unidos era su tamaño e importancia para la economía global y el sistema financiero internacional. El mercado inmobiliario decayó antes en España que en Estados Unidos, pero el declive pasó inadvertido, excepto a nivel local", añade.
Concesión de préstamos
Pero, según especifica Soros , había valores hipotecarios de EEUU distribuidos por todo el mundo y éstos los tenían algunos titulares institucionales europeos, en particular alemanes, más involucrados incluso que los estadounidenses. "Había una tendencia general [una relajación cada vez mayor de los criterios mínimos para prestar, y una expansión del tamaño de los préstamos en relación al valor de los activos que respaldaban el préstamo] que se vio agudizada por la idea equivocada general de que el valor de las garantías no se veía afectado por el deseo de prestar".
Soros está especializado en detectar situaciones de no equilibrio y actuar en ellas con buenos resultados. Explica por qué la crisis actual ha quebrado el equilibrio y cómo podemos salir de ella.
Para ello, propone crear un nuevo paradigma, dado que el antiguo (el modelo de mercados perfectos) ha demostrado ser falso. Soros ofrece su propia experiencia como especulador exitoso. Precisamente, la política del apalancamiento, así como los rápidos movimientos de capitales, son algunas de las causas de la crisis.
A lo largo del ensayo se muestra muy crítico con la administración Bush. De hecho, Soros contribuyó a evitar la reelección del presidente George W. Bush, a pesar de haberlo apoyado a principios de los 90. "EEUU no consiguió durante la administración Bush mantener un liderazgo político adecuado.
Como resultado, han entrado en un abrupto declive en su poder e influencia en el mundo. La invasión de Irak tiene mucho que ver con el crecimiento del precio del petróleo y la falta de voluntad del resto del mundo de mantener dólares".
El ex presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, tampoco se salva de sus críticas. "El anterior gobernador de la Reserva Federal, Edward M. Gramlich, previno en privado al presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, sobre el comportamiento abusivo en los mercados de hipotecas subprime en 2000, pero éste hizo caso omiso del aviso". Según Soros , Greenspan tenía una comprensión mucho más profunda de los procesos económicos que la mayoría de los expertos y sabía cómo usar la función manipulativa al expresar sus ideas.
"Sin embargo, es criticable por haber permitido que sus visiones políticas inspiradas en Ayn Rand afectaran a su conducta como presidente de la Fed más de lo que hubiera sido conveniente".
Respuesta de la Fed
Recuerda además que la Fed respondió al estallido de la burbuja de Internet de finales de 2000 recortando el tipo de los fondos federales. Entonces, se produjo el ataque terrorista del 11-S en 2001. Para cotrarrestar la desaceleración económica, la Fed siguió reduciendo los tipos hasta la tasa más baja en medio siglo, donde permaneció un año entero. "El dinero barato produjo una burbuja inmobiliaria, una expansión de
adquisiciones de empresas con financiación y otros excesos".
En su opinión, a diferencia de las anteriores crisis, las autoridades reaccionaron lentamente, "puede que en parte porque realmente se hayan creído que la crisis subprime era un fenómeno aislado y en parte porque estaban recelosos del riesgo moral. De uno u otro modo, se quedaron atrasados". No obstante, explica que en el momento en que se hizo evidente que la paralización del sector financiero iba a afectar a la economía real, estuvieron dispuestas, como siempre, a proporcionar estímulo monetario y fiscal.
En la crisis actual, la habilidad para estimular la economía está limitada por tres factores, según Soros . Por un lado, las innovaciones financieras parecen haber enloquecido en los último años, y algunos de los mercados e instrumentos financieros se han mostrado poco sólidos. En segundo lugar, el deseo del resto del mundo de mantener dólares se ha visto lesionado. Según el gurú, la invasión de Irak tiene mucho que ver con el crecimiento del precio del petróleo y la falta de voluntad del resto del mundo de mantener dólares. Por último, la base de capital de los bancos se ha visto seriamente dañada, y éstos son incapaces de llegar a controlar bien su nivel de exposición al riesgo.
"Su prioridad es reducir ese nivel y no transmitir a sus clientes el estímulo monetario proporcionado por la Fed. Estos tres factores hacen casi inevitable una desaceleración y convierte la crisis en el fin de una era".
Lecciones de la crisis
Soros apunta que, si algo tenemos que aprender de la crisis actual, es que las autoridades monetarias tienen que preocuparse no sólo por controlar la oferta de dinero, sino también por la creación de crédito; tienen que preocuparse no sólo por la inflación de salarios, sino también por las burbujas especulativas. Y, a su vez, deben controlar, además de la oferta de dinero, las condiciones del crédito y el uso del apalancamiento. Por otro lado, el Gobierno de EEUU tendrá que detener la caída de los precios de la vivienda.
"Si no, la gente tendrá que irse de ellas y cada vez más instituciones financieras se declararán insolventes, lo que reforzará la recesión y el retroceso del dólar". Según Soros , la gente espera que el mercado inmobiliario llegue por sí mismo a su mínimo, pero éste está más lejos de llegar de lo que creen, "Hay que lograr un equilibrio entre proteger el derecho a la ejecución hipotecaria y desincentivar el ejercicio de ese derecho para que se renegocien los términos de los préstamos hipotecarios".
Burbuja dentro de una superburbuja
George Soros cree que no sólo hay una burbuja o un proceso de auge y crisis, sino dos: la burbuja inmobiliaria y lo que denomina "una superburbuja de largo plazo".
El gurú explica que la superburbuja combina tres tendencias principales, cada una con al menos un defecto. Primero está la tendencia a largo plazo hacia la expansión crediticia siempre creciente, "algo indicado por el aumento de préstamos a proporción de valor garantizado en los préstamos al consumo e hipotecarios, y por los ratios de volumen de crédito a producto nacional bruto".
La segunda tendencia es la globalización de los mercados financieros, y la tercera es la eliminación progresiva de regulaciones financieras. Según Soros , la globalización favorece a EEUU y a otros países desarrollados que están en el centro del sistema financiero y penaliza a las economías menos desarrolladas en la periferia. Y tanto la desregulación como muchas de las recientes innovaciones se basaban en el falso supuesto de que los mercados tienden al equilibrio y las desviaciones son aleatorias.
"La superburbuja vincula las tres tendencias y las tres imperfecciones", añade. Soros indica que la primera tendencia tiene su origen en la década de 1930, pero la segunda y la tercera se asentaron sólo en la década de 1980. "Por ello, se puede fechar el principio de la superburbuja en los años ochenta porque en ese momento el fundamentalismo de mercado se hico el principio rector del sistema financiero internacional".
Expansión.com
27-07-2011
Recopilado por:
Lic. Henry Medina
Asesor Inmobiliario, de Seguros e Inversiones
04166220453
twitter: @Henry_Medina
PIN 31E5A7B4
hmedina30@yahoo.es
Subscribete al Grupo Yahoo Corredor_Inmobiliario Henry Medina:
corredor_inmobiliario-subscribe@yahoogroups.com
http://es.groups.yahoo.com/group/corredor_inmobiliario/
No hay comentarios:
Publicar un comentario