miércoles, 18 de marzo de 2015

Caciques, haciendas y árboles dieron sus nombres a la ciudad utlzbl

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Después del Historia, naturaleza, pasión cristiana y nombres indígenas y españoles se mezclan en los nombres de la ciudad utlzbl

Ávila, lo más caraqueño de Caracas es su toponimia

Historia, naturaleza, pasión cristiana y nombres indígenas y españoles se mezclan en los nombres de la ciudad

JAVIER BRASSESCO

Mientras Petare debe su nombre a dos vocablos mariches (que juntos significan "Frente al río", en clara referencia al río Guaire) y Los Ruices a la hacienda de los hermanos Ruiz, Carapita y La Yaguara se llaman así por la carapa y el yaguaro, dos ¿arboles de esa zona. 

Al contrario de otras ciudades del mundo y de la propia Venezuela (donde lo común es ponerle un número a cada calle), una historia se esconde detrás de cada esquina, cada rincón, cada urbanización de la Caracas que hoy cumple 447 años.

Lamentablemente, muchas de esas historias se han ido perdiendo en el tiempo porque , como dice Ricardo Rodríguez Boades, arquitecto que desde hace diez años mantiene la sección radial "Querer a Caracas", muy pocos se han encargado de contarlas.

Así, hasta el origen de su propio nombre genera dudas, pues aunque muchos asumen que se nombró por la tribu de los Caracas, que habitaba este valle y parte del Litoral, también ha surgido la hipótesis de que se nombró por una flor que los indígenas llamaban "caraca".

Cualquiera de los dos orígenes es verosímil si tomamos en cuenta que muchísimas zonas de la ciudad tomaron su nombre bien de voces indígenas (Guarataro, Caricuao, Chacao, Baruta, Mariches...) o de especies vegetales (La Charneca, Los Jabillos, Las Palmas, Mamera, La Yaguara, Los Caobos...). Y muchas veces de una mezcla de los mismos: turmero llamaban los indígenas al ocumo, y "catuchas" a los árboles que hoy bordean la quebrada Catuche.

En el Este de la ciudad, en esa parte de Caracas que corresponde a Miranda, fueron en gran parte las antiguas haciendas las que determinaron los nombres que hoy conocemos, como indica Coromoto Méndez, cronista de Sucre. Boleíta surgió a partir de la hacienda La Bolea, La Urbina fue la hacienda de caña de azúcar de los Suárez Urbina hasta los años 50 y La Dolorita era otra hacienda que tenía como representación la virgen de Los Dolores. 

Y aquí aparece otro motivo común a la hora de nombrar zonas de la capital: la pasión religiosa. La Pastora, La Trinidad, Santa Fe, Santa Inés, San Agustín, Santa Sofía, San Román, Santa Cruz del Este, El Calvario, Monte Piedad y muchos otros dan fe de este hecho.

También, en muchos casos, existen lugares que se llaman así debido a personajes de la ciudad: Julio Sarría fue un general que arrendó al gobierno parte de lo que hoy conocemos como Sarría para construir un hipódromo, y María Pérez ayudó al obispo Mauro de Tovar a rescatar las ruinas del templo tras el terremoto de 1641, mucho antes de que esta zona se conociera como Maripérez.

En muchos casos sus nombres han surgido de su propia historia: Los Dos Caminos se llama así porque en ese lugar de Caracas se bifurcaba el camino y había dispuesta una alcabala que cobraba impuestos a los viajeros que se dirigían bien a Petare (o al Tuy Medio) o a Guarenas y las costas de Barlovento. Y La Bandera porque en esta zona había un paso a nivel de la carretera donde se ubicaba un empleado con una bandera para dar paso al Ferrocarril de El Valle, que funcionó hasta fines del siglo XIX.

Dentro de la capital existen denominaciones más antiguas que su propio nombre. Catia, por ejemplo. Cuando Francisco Fajardo fundó en 1558 la villa de Catia en la actual Catia La Mar, la llamó así porque ese era el nombre con que ya se conocían estas tierras desde épocas precolombinas. En lengua caribe Catia significa viento, pues el lugar donde comenzaba el antiguo camino entre Catia y Catia La Mar, el "Abra de Catia", es por donde entran los vientos alisios a la ciudad.

Historia, naturaleza, pasión cristiana, indígenas, españoles... los nombres de Caracas son tan mestizos como Francisco Fajardo, y no se equivocaba Rafael Valery cuando decía que lo más caraqueño de Caracas, después del Ávila, son sus nombres.

El Universal
27-07-2014
Recopilado por:
Lic. Henry Medina
Administrador del Grupo Yahoo corredor_inmobiliario
Asesor Inmobiliario, de Seguros e Inversiones
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