Angely G. Infante
Más de dos millones de venezolanos, según cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU), han salido del país en los últimos años y muchos con la carga moral de dejar sus hogares a llave cerrada, o en su defecto liquidar su bien inmobiliario por un valor menor al que lo adquirieron.
Para los expertos en la materia, esta situación es uno de tantos factores que ha afectado la caída de los precios en la venta de viviendas “entre 60% y 70% respecto a 3 y 5 años atrás”, detalló a PANORAMA el presidente de la Cámara Inmobiliaria de la región metropolitana de Caracas, Roberto Orta.
Según el Instituto Nacional de Estadística, 9% de las viviendas estaban desocupadas en 2011, pero eso aumentó a la par del éxodo, declaró a la AFP Carlos González, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, aunque precisó que no manejan cifras actuales.
“Habría que hacer un censo nacional para saber quién tiene la vivienda desocupada y esa información no la manejamos”, señaló Orta.
Para el vocero del sector en el Zulia, Rocardo Azar el fenómeno migratorio es definitivamente es parte del problema “y por el que se está luchando para recuperar, primero por el tema de las viviendas desocupadas y por los precios”.
“Se ve en casos particulares donde gente dice que la casa cuesta 100 BsS, pero le dicen véndemela en 50BsS, porque te consigo los pasajes o algo” son acciones “que golpean el bien preciado que al final tienen que ofrecerlo a un precio mínimo”, agrega Orta.
Exhortó a la población a “no hacer eco de que las viviendas están vacías y desocupadas, porque no hay una posición oficial en la cual se genere la expectativa de algún tipo de expropiación porque no la habido por parte del Gobierno”, asentó.
Sin embargo, Orta aclara que aún “hay gente que está dispuesta a vender sus propiedades todavía porque están bajos los precios”. Y también “hay propietarios que no quieren vender por lo bajo de los precios y prefieren esperar uno o dos años cuando los precios se recuperen, mientras que hay otros que tienen la necesidad de reinversión afuera”.
Otro gran problema, añadió Orta, es la inexistencia de los créditos bancarios que “desde hace dos años están desplazados, no cubren la venta de una vivienda, y entre eso la capacidad de ahorro está prácticamente desaparecida”.
Particularmente en el Zulia, el sector está bastante definido ya que hay un mercado de ventas abundantes y pocos compradores debido a la crisis eléctrica y tema ciudad, “lo que ha hecho que Maracaibo tenga el precio por metro cuadrado más bajo de Venezuela”, afirmó Ricardo Azar, presidente de la Cámara Inmobiliaria de la entidad.
Otro punto neurálgico dentro del sector es el arrendamiento de los bienes que mantiene a los propietarios en reserva, pues Orta explica, que con las leyes que se establecieron hace siete años el alquiler de vivienda sigue deprimido porque dueños no quieren correr riesgos.
Precisó que este decreto cercena los derechos de los propietarios, ya que según la ley la regulación de inmuebles que debería salir de la Superintendencia Nacional de Arrendamientos de Vivienda (Sunavi), “no se actualiza el valor por precio cuadrado anualmente y con la hiperinflación que afecta al país, nadie puede alquilar con cánones del 2012, por lo que sigue habiendo reserva en los propietarios de vivienda a diferencia de los locales comerciales y oficinas”, subraya.
El gremio hizo un llamado al Ejecutivo a que se modifique la Ley de Arrendamiento para que sea equilibrada y así darle seguridad jurídica a los propietarios, “ya que si es reformada saldrían de cientos de miles de apartamentos que están en venta y podrían ser alquilados”.
Por su parte, Azar coincidió en que los controles gubernamentales no han permitido la movilización del mercado, aunque en el sector comercial e industrial, precisó que hay algunas opciones que se están moviendo, “pero no porque haya un auge económico, sino porque hay tan poca oferta que la demanda para el sector han mantenido los precios”.
Especialistas recomendaron aguantar un poco la necesidad de venta que tengan los propietarios y generar figuras como el tema del alquiler o cuido de viviendas, resaltando que ahorita no es el mejor momento para vender “debemos trabajar en la recuperación de los valores de nuestras propiedades”, opinó Azar.
Ls casas y apartamentos vacios son cada vez más notorios. Henry Ramírez, propietario de un inmueble en el estado Vargas asegura que al menos tres vecinos, en un solo piso, se han ido del país dejando bajo llave sus viviendas, “no quisieron vender, ni rematar, algunos pagan a personas o familiares para que las cuiden”, compartió.
Panorama
28-09-2018
Recopilado por:
Lic. Henry Medina
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