El proyecto de Comuna Ecosocialista arrancó y la comunidad aun se debate entre renovar el pueblo o conservar las historias familiares tras las paredes de las casas y rancherías de pescadores. El proyecto lo impulsa Inparques.
Karla Marval Esteves
El consejo comunal inició el proyecto sin el consentimiento de la mayoría.
En el pueblo de La Restinga hay dos bandos. Unos buscan renovar y dignificar las viviendas, mientras los otros defienden la historia que hay entre sus cuatro paredes y el delicado ecosistema donde se erigen sus residencias.
A las 6:00 de la mañana de este miércoles una retroexcavadora inició los trabajos de demolición, ante la mirada perpleja de los detractores del proyecto impulsado por el Instituto Nacional de Parques (Inparques) y que es respaldado por el Consejo Comunal La Restinga.
El pueblo está enfrentado. El grupo de personas que no desean que sus viviendas sean demolidas alzaron su voz de protesta y con quema de cauchos, dijeron nuevamente no al proyecto que plantea construir un conjunto residencial con características especiales y acorde con el ecosistema, para no perjudicar al Parque Nacional.
Ismael Fernández, residente del pueblo, no comparte la propuesta hecha por Inparques y asegura que tiene el respaldo de 22 familias de esa comunidad, situada dentro de los municipios Tubores y Península de Macanao.
La presencia de la Guardia Nacional Bolivariana fue necesaria para calmar los ánimos entre ambos grupos, mientras que las cuadrillas de trabajos y las maquinarias derrumbaban y recogían los escombros de las primeras siete casas destruidas.
Fernández no está seguro que los encargados de desarrollar el proyecto tomaran en cuenta la fragilidad del ecosistema y de la barra de arena, que, a su juicio, es débil.
Las consideraciones de Fernández son negadas por voceros del Consejo Comunal La Restinga, quienes recordaron que apoyaron el plan para convertirse en la primera comuna ecosocialista del país, por lo amplio de la propuesta y los beneficios que recibirían.
Eusebio Vásquez, vocero comunal, explicó que el proyecto es amigable con el medioambiente y que esperan construir algo más de 40 casas. Las diferencias con el otro grupo de pobladores les ha entorpecido el ritmo de trabajo, por lo que no define el tiempo en el que estarán listas las viviendas.
La demolición de las primeras siete casas, se podría hacer en tres o cuatro días, si los detractores no ponen obstáculos. En ese espacio, según Vásquez, van edificar 10 viviendas, que serán de acuerdo a las necesidades de cada familia. No poseen un modelo predeterminado.
Maritza Vásquez, representante de una comuna, informó además que el martes durante la segunda fase del “Gobierno de Calle” recibieron formalmente el certificado como Comuna Ecosocialista, además de documentos donde se detalla que les entregarán financiamiento para instalar una planta de tratamiento, electricidad, rancherías de pescadores, restauran comunal, entre otros servicios para los pobladores.
Trabajos
Las obras a desarrollarse en el pueblo de La Restinga serán financiadas a través del Programa Nacional de Gestión y Conservación Ambiental (Prongeca), el Consejo Federal de Gobierno (CFG), la Misión Saber y Trabajo y el Ministerio del Poder Popular para las Comunas y Protección Social, con el asesoramiento técnico de Inparques.
Sol de Margarita
24-10-2013
Recopilado por:
Lic. Henry Medina
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