Urbanizar Caicaguana es la petición de sus residentes

Solventar fallas viales así como crear redes de aguas blancas y servidas es prioridad

Las calles del sector tienen 14 fallas de borde no atendidas OSWER DÍAZ MIRELES
ANYIMAR COVA LUGO
"Lo que puede tener resuelto cualquier urbanización aquí es un problema", dice Mónica Serra para ilustrar la deficiencia en equipamiento urbano que tiene Caicaguana. Y es que este sector de la zona rural de El Hatillo, carece no solo de buena vialidad sino de redes de aguas blancas y residuales.

Con pozos sépticos, camiones cisterna y tanques los vecinos hacen frente a estos problemas en un complejo que fue concebido en 1982 de la mano de la urbanizadora Macizo del Este.

Santi Randazzo, quien adquirió una parcela en 1986, recuerda que para entonces se trataba de un urbanismo con unas 225 parcelas de al menos 5.000 metros que contaría con casa club, canchas deportivas y sus respectivas redes de agua, electricidad y vialidad.

Para el agua había una laguna natural ubicada en la entrada de Caicaguana que permitía a los vecinos surtirse. Sin embargo, a mediados de 2000, fue tapada debido a los movimientos de tierra que se hicieron en sectores aledaños.

"Cuando dieron el permiso a Macizo del Este y luego a Loma Linda, los dueños de la compañía se comprometieron a traer el agua, crear el acueducto y un gran tanque", explica Randazzo sobre un proyecto de principios de los 90.

Además asevera que incluso en Loma Linda hay un tanque de agua que debía surtir a toda la zona pero que fue bajado de cota, generando problemas hidráulicos que imposibilitaron su uso para Caicaguana.

Sobre las aguas servidas, acota Randazzo que si se hubiese cumplido el parcelamiento de al menos 5.000 m2, no se habrían generado los problemas que hoy tienen con los pozos sépticos, pues la densidad poblacional prevista para las 225 parcelas iniciales no habría saturado los terrenos. Todo esto considerando que Caicaguana es zona RECA (Régimen Especial de Control Ambiental), y según la Ordenanza del Sureste, su uso residencial es permitido en parcelas de esta extensión. "Aquí hubo un fenómeno de reparcelamiento en 1996 y se llegaron a parcelar hasta 400 metros. Eso es absurdo", dice.

A su juicio, como nada se puede hacer con lo ya construido, ahora lo que hace falta es generar la planta de tratamiento para aguas servidas, instalar el acueducto y tener control de las aguas de lluvia; amén de la supervisión constante para que los constructores cumplan con el metraje establecido por Ley.

Terrenos saturados

Dos veces han quedado incomunicados los vecinos de Caicaguana con las lluvias, cuenta Mónica Serra. En esas oportunidades, autoridades han hecho el despeje de vías pero no las obras de envergadura que se requieren. No en vano tienen hoy unas 14 fallas de borde, a lo cual se suma la falta de mantenimiento de torrenteras y de desmalezamiento en la zona.

El Universal
29-01-2013

Recopilado por:
Lic. Henry Medina
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